viernes, 13 de marzo de 2015

El hombre de la piel de oso

El hombre de la piel de oso

El cuento que voy a adaptar está basado en la historia “la piel de oso” de los hermanos Grimm. Esta adaptación está dirigida a niños de 5-6 años debido a la longitud de la propia historia.

A la hora de adaptar cuentos, tenemos que tener en cuenta la edad de los niños a los que va dirigida, creo que la mejor edad para adaptar este cuento es la de 5-6 años. Podemos encontrar estos ejemplos de las características en el desarrollo evolutivo de los niños de esta edad:
  • ·         Es una edad muy fácil, los niños de esta edad son más conformistas.
  • ·         Los conocimientos adquiridos hasta este momento se organizan y solidifican.
  • ·         Su motricidad ahora es más tranquila, lo que le permite disfrutar en espacios reducidos.
  • ·         El niño expresará en sus dibujos el realismo intelectual, es decir, lo que dibuja el niño no es la realidad, sino los objetos tal y como son para él.
  • ·         El niño expresará con sus dibujos lo que no puede expresar de otro modo.


He cambiado algunos aspectos de la historia, ya que para los niños no era totalmente  adecuada y también he intentado acortarla con la intención de hacerlo más dinámico. Los cambios son los siguientes:
  • He puesto nombres propios a los personajes principales de la historia, ya que para los niños es algo muy importante para poder identificarlos de forma más fácil y clara. (No identificarse con ellos.)
  • El protagonista se llama Ezequiel, Durc el elfo, Amarilda es la prometida y futura esposa de Ezequiel, Anastasia hermana de Amarilda y Leopoldo el padre de las hermanas.
  • En el cuento original, el personaje mágico es el demonio, en mi adaptación este personaje mágico será un pequeño elfo. He hecho desaparecer al diablo ya que tiene connotaciones religiosas y es un personaje que suele producir miedo a los niños.
  • En la estructura del cuento original existe una introducción, un nudo y un desenlace, igual que en mi adaptación solo que esta estructura será reducida en cuanto a contenido, eliminando contenido poco significativo.
  • Cambiaré algunos aspectos de la historia narrada en clase, ya que no les veo relevancia, como puede ser el encuentro con varios personajes que no llegan a ningún fin concreto.
  • La estructura, los roles y los motivos quedarán intactos.
  • Para terminar, como fórmula de salida un: “Y colorín colorado, este cuento se ha acabado”


Sin más dilaciones, he aquí la adaptación que he hecho del cuento.



Había una vez, hace muchos, muchísimos años, cuando todavía existían las hadas madrinas, en un país muy lejano un joven guapo, alto y fuerte llamado Ezequiel.

Su madre estaba muy enferma, por lo que un día Ezequiel pensó que podría ser el único que la ayudara por lo que decidió irse de su casa en busca de una piedra mágica que según había escuchado en una historia, daba salud a toda persona que la consiguiera, y a su familia. 

Después de andar mucho tiempo, llegó a un río, y se acercó a él para beber un poco de agua. Al acercarse vio la sombra de un pequeño ser que se movía rápidamente. Era Durc, un pequeño elfo, este pequeñín era muy juguetón, por lo que no dejaba de saltar alrededor de Ezequiel.
  • Me presentaré, me llamo Durc, y después de escucharte que estabas buscando la piedra quiero proponerte un trato. ¿Aceptas?

Ezequiel, tardó pocos segundos en responder:
  • Claro, ¿Qué tengo que hacer?
  • Comenzamos con la primera prueba, tienes que trepar hasta lo más alto del árbol y coger esa piel de oso que está allí arriba.

Ezequiel, rápidamente subió. La prueba le parecía muy fácil, por lo que quiso saber más.
  • Muy bien dijo Durc, esta piel tendrá unos poderes que yo le daré. Cada vez que metas las manos en sus bolsillos sacarás un puñado de monedas de oro. Durc movió las orejas y listo, la piel de oso era mágica. Las demás pruebas son las siguientes:
  • No podrás lavarte ni cortarte las uñas durante siete años, también deberás llevar puesta esa piel de oso que has conseguido. Además no podrás estar más de una semana en el mismo sitio, por lo que tendrás que ir cambiando de casa. Eso sí, siempre que metas la mano en el bolsillo sacarás un puñado de monedas de oro, podrás coger todas las que quieras, y guardarlas para ti. Si me ganas, y consigues estar los siete años así, te devolveré tu aspecto normal y te daré esa piedra que tanto estabas buscando. Pero si no consigues superar nuestro trato, nunca podrás volver a tu casa, y todas tus monedas de oro desaparecerán.


Ezequiel y Durc cerraron el trato con un fuerte apretón de manos, y sin darse cuenta el pequeño elfo desapareció.

Lo primero que hizo Ezequiel fue meter la mano en el bolsillo y sacar un puñado de monedas. El primer año empezó a guardar muchas monedas, con lo que pudo comprarse una gran casa y un caballo para poder viajar. Durante este año, Ezequiel fue dando monedas de oro a la gente que lo necesitaba con una gran sonrisa.

Cuando llevaba ya dos años cumpliendo el trato, Ezequiel tenía una imagen horrible, ni si quiera la gente a la que ayudaba quería acercarse a él. Tenía el pelo y las uñas muy muy largas, y además tenía un olor muy fuerte nadie quería ser su amigo.

Una noche que hacía mucho frío, decidió entrar en un granero para poder dormir. Cuando estaba acostado, escucho a un hombre llorar, con mucho cuidado para que no se asustase se acercó a él. Leopoldo al ver a Ezequiel se asustó un poco, ya que después de tantos años, tenía unas pintas horribles, la piel del oso olía mal, sus uñas eran largas y con forma de aguja. Leopoldo, que así se llamaba el hombre le contó que tenía dos hijas que no podía mantener, ya que tenía problemas con el dinero.
  • Tengo la solución, dijo Ezequiel.
  • Leopoldo nervioso le pregunto, ¿De qué se trata?
  • Meteré la mano en mi bolsillo y sacaré varios puñados de monedas para ti. Creo que así podremos arreglar tus problemas- dijo Ezequiel.

Leopoldo estaba tan contento que le invitó a cenar con él y sus hijas, Amarilda y Anastasia, y le dejaría casarse con una de ellas.

Finalmente llegaron a cada de Leopoldo, y le presentó a sus dos hijas, Amarilda que era la mayor, al ver a Ezequiel de esa manera dijo que nunca se casaría con él, era un hombre sucio y olía mal. Sin embargo, Anastasia que era la menor de las hermanas dijo:

  • Si es verdad que usted ha ayudado tanto a nuestro padre, debes ser un hombre bueno, por lo que me casaré con usted.

Pasaron una semana entera conociéndose a su futura, tanto que se enamoraron. El último día, Ezequiel antes de irse, cogió un pequeño anillo que tenía de su madre y lo partió por la mitad. Cogió una parte, se la dio a Anastasia y la dijo:
  • Solo necesito que me esperes 3 años, si cuando vuelva sigues enamorada de mí nos casaremos.

Después de siete años, Ezequiel volvió a aquel río donde se encontró la primera vez con Durc, como la primera vez, el pequeño elfo apareció de repente.

Durc le pidió que le devolviera la piel de oso, y le dijo que ya era libre. Antes de que se fuera Ezequiel le gritó.
  • ¡Espera! Me prometiste devolverme a mi aspecto normal, y darme aquella pierda que podría ayudar a mi madre.

Así lo hizo, Durc agitó un poco las orejas y Ezequiel volvió a ser aquel chico guapo y con buena presencia.

Ezequiel fue corriendo a la casa que había comprado, dio un baño a su caballo, saco dinero de su escondite, se compró un bonito traje para ir a buscar a su futura esposa.

Cuando llegó a la casa de su futura esposa, Amarilda, la hermana mayor le recibió con una gran sonrisa, y le invitó a pasar. Mientras ella fue a su habitación a ponerse guapa, Ezequiel se quedó a solas con Anastasia. Mirándola a los ojos, sacó la mitad del anillo de su bolsillo y la dijo:
  • Anastasia, soy yo Ezequiel, ¿todavía sigues enamorada de mí?

Anastasia sorprendida, lo abrazó y por supuesto le dijo que sí, que seguía enamorada y quería casarse con él. Amarilda al ver esto, se puso muy triste y decidió irse para nunca volver.

Ezequiel y Anastasia, llevaron a su madre la piedra mágica para que se curase.
Finalmente Anastasia y Ezequiel fueron felices y comieron perdices por mucho tiempo.


Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.

6 comentarios:

  1. Hola Sandra,

    has hecho una bonita adaptación del cuento “Piel de oso”.
    Está escrita de manera amena, que atrapa enseguida, y llena de encanto para los niños de 5 años a la que va dirigida.

    Me han gustado los cambios que has hecho; el personaje del diablo por el elfo Durc, has acortado la narración, la has hecho más dinámica.

    Echo de menos en el planteamiento de tu historia, el hecho de que el protagonista se marche de casa, el motivo del viaje y de búsqueda que supone crecimiento personal, y la consiguiente vuelta al hogar. Creo que es importante para empezar el cuento.

    Hay un par de detalles que a mi gusto podrías “completar”:

    Ezequiel saca las monedas de un bolsillo y yo interpreto que es de la piel del oso porque el elfo le dice que “esta piel tendrá unos poderes que yo le daré”…
    Si cuentas a los niños cuales son los poderes de la piel, para ellos será mñás fácil seguir la historia.

    Cuando cuentas que Leopoldo ve a Ezequiel y se asusta de su aspecto, debe ir en cuanto se encuentran, no después de haber tenido la conversación.
    Los niños necesitan que la narración tengan un orden cronológico y lineal.

    Por lo demás, felicitarte por tu trabajo y darte las gracias, ya que he disfrutado mucho leyendo tu cuento.

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    1. Muchísimas gracias por tu comentario Carmen, creo que tus aportaciones son totalmente correctas por lo que he realizado ciertos cambios y creo que finalmente la historia esta perfecta. Una vez más muchas gracias :)

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    2. Un excelente comentario, Carmen. Has ayudado a Sandra. Buen trabajo.

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Bueno, Sandra, tú eres quien ha realizado la adaptación y la longitud, es un aspecto fácilmente adaptable. La frase "Esta adaptación está dirigida a niños de 5-6 años debido a la longitud de la propia historia" no es muy adecuada. No es el cuento (la longitud) quien marca la edad, sino el adaptador. En la literatura de autor, la edad adecuada la marca el libro; en la literatura folclórica eres tú, como maestra, quien acerca el texto a los niños de una u otra edad... pero no por la longitud, sino por el enfoque y por los aspectos que remarques y en los que te detengas.
    La explicación que haces del momento evolutivo de los niños no se ajusta a los aspectos que subyacen a los cuentos folclóricos (temática, fantasía, relación entre causas y consecuencias, simbología, etc...) Hablas de conformismo, de conocimientos, de motricidad, de dibujos... nada de esto es aplicable a la comprensión de un cuento folclórico que debe narrarse oralmente en forma de cuentacuentos. Debes buscar información sobre los intereses y competencias relacionadas con la comprensión oral de la literatura.
    La explicación de los cambios, sin embargo, es muy buena.
    En el cuento hay un aspecto que no cuadra y es el motivo por el que Ezequiel quiere la piedra. Siete años son muchos si su madre esta TAN enferma... debes buscar otro motivo más coherente porque, como se explica en la teoría, a la fantasía del folclore literario siempre subyace la lógica.
    Si modificas el principio y cambias ese detalle del cuento, tu entrada será perfecta.

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  4. Hola Sandra!! Me parece una adaptación adecuada, aunque he de decirte que desde mi punto de vista terminaría de contar algunas cosas que has dejado caer en la historia, como por ejemplo, el motivo del viaje, el que la piel de oso tiene poderes y puede sacar montones de monedas. Por lo demás me parece adecuado y de utilidad para contarlo en clase.

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